Es común pensar en un proceso psicoterapéutico como un largo y duro camino hacia un tranquilidad y una felicidad lejanas. Nada más equivocado.

Quizás no sepas que al acercarte con un profesional de la psicología clínica -un psicoterapeuta, Counselor o afines- el beneficio que consigues comienza desde la primera sesión, y en ocasiones una sesión es suficiente para recibir una orientación, un punto de vista objetivo y profesional acerca de una situación que se siente confusa, y para hallar un camino de resolución y continuarlo por tu cuenta.

Técnicamente, ésta se llama terapia de Sesión Única –Single Session Therapy- y hoy en día muchos clínicos la practican.

Además, actualmente es muy común que los psicoterapeutas de diferentes formaciones se inclinen por trabajar procesos terapéuticos breves (8 a 12 sesiones) o de duración mediana, es decir unos cuantos meses. Incluso los de formación psicoanalítica tienden a evitar procesos muy largos (muchos años). Aunque hay situaciones individuales que requieren un tratamiento mucho más profundo, esto no es lo más común par la mayoría de las personas que buscan apoyo.

La duración de un proceso psicoterapéutico en general se va negociando entre ambas partes, el profesional y el paciente/cliente, ya que implica varios factores, entre ello la disposición de este último y las sugerencias del terapeuta con base en lo que va identificando respecto a la situación de la persona.

Pero recuerda, una única sesión puede hacer más por ti de lo que imaginas.